Es curioso, pero tanto rato que me paso en la cocina y nunca se me había ocurrido preparar dulces navideños. Esto no puede ser!!
Así que este año me he decidido a preparar turrón y mazapanes, hala, porque yo lo valgo.
Y me pongo manos a la obra. Mientras, no puedo dejar de pensar en lo bien que me van a quedar… que ricooooo!!
Ya os adelanto que lo del turrón ha sido un fracaso totaaaaaal. He hecho un par de intentos y no he conseguido más que una papilla chunga que había que comer con cuchara, y que finalmente terminó en la basura. Y como no tengo paciencia para volver a intentarlo, he desistido… pero sólo por el momento, que me lo apunto como tarea pendiente !!
Tras este frustrante intento, me pasé a los mazapanes. Y esta vez sí que fue un éxito.
Todo hay que decirlo, son muuuuy facilitos de hacer, así que me atribuyo sólo un mérito relativo…
Para hacerlos, solamente necesitamos 3 ingredientes:
– 200 gr de almendra molida
– 200 gr de azúcar glas
– 1 huevo
Mezclamos la almendra con el azúcar. Hazlo a mano, con un tenedor. Por una vez podemos dejar de lado la batidora… Aconsejo utilizar un bol grande, de boca ancha y un poco profundo. Yo, toda chula, intenté arreglarme con uno pequeño y terminó toda la almendra por el suelo.
A continuación, separamos la yema de la clara. Batimos un poquito la yema con el tenedor y la reservamos en la nevera para más tarde.
Ahora batimos también la clara. No hace falta mucho, sólo hasta que quede espumosa. Y se la agregamos a la mezcla de almendra y azúcar. Mezclamos con el tenedor con un poco de cariño. Adelanto que el proceso es una marranada, porque no mezcla bien y se te hacen pegotes. Trata de integrarlo todo lo que puedas aplastando con el tenedor, porque tarde o temprano tendrás que meter las manos, y cuanto más tarde, menos pringue.
Finalmente obtendrás una masa arenosa. Separa pequeñas bolitas y apriétalas bien con las manos para que queden apelmazadas y se puedan hacer las figuritas. Decóralas a tu gusto. Intenta que todas las figuritas tengan un tamaño similar, o al cocerlas se harán más unas que otras.
Por último, píntalas con la yema con ayuda de un pincel antes de meterlas al horno ya precalentado a 200º. Sólo queremos que se doren un poco, así que con unos minutitos de calor sólo por arriba será suficiente.
Si nos pasamos se quedarán secos, así que en cuanto los veas dorados, puedes sacarlos.
Advertencia: sé por experiencia que según salen del horno, calentitos y doraditos, están muy apetecibles, pero… hacedme caso! mejor esperáis a que enfríen, o es probable que os hagan daño. Además, queremos que nos duren al menos unos minutos, verdad?
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